Mi reality bite de hoy…ese momento con el que me quedo.
Se estaban dando un baño y charlamos un rato, los tres. Las pestañas de Bosco estaban pegadas por el agua como si les hubiese puesto rimel. Yo lo miraba y pensaba lo guapo que estaba ( genmadre) y claro foto, foto, foto.
Charlamos. Cuando están relajados, cuando estamos relajados, hablamos, me cuentan. Pusimos música y me puse a bailar como si no hubiese un mañana. Se les notaba ya en la cara esa vergüenza, esa de mi madre la está montando, esa cara de ¿qué haces mamá? Esa de ya soy mayor y estás haciendo el ridículo ¿en qué momento pasas a ser la madre que hace el ridículo?, es demasiado pronto. Pero yo seguía bailando sin parar, cantando, desafinando y al final tuvieron que unirse a mi, y bailamos y nos reímos, hicimos coreografías y quise congelar ese preciso momento.
Me queda poco, me queda poco para convertirme en la madre plasta, porque sí, al final todas nos acabamos convirtiendo en esa madre plasta que no para de dar la paliza. Por eso quiero aprovechar al máximo estos momentos de cantar, de hacer el tonto, de reirnos…
Se hacen mayores y yo solo puedo disfrutar del momento.
9 Comments
Todas seremos madres plastas, pero gracias a esos momentos antes de convertirnos en eso, dejaremos de serlo cuando se pase la época Mr. Hyde. De todos modos, cuanto más hagamos el tonto, cuanto más bailemos y más cantemos a voces, más acostumbrados estarán a vernos así y menos vergüenza les dará… Ésa es mi esperanza…
ayy que guapo esta! es preciosa la foto con sus pestañas pegadas!
pero me ha encantado el momento de madre plasta…porque tienes razón, todas, nos guste o no, lo seremos…y si no los somos, es que no estaremos haciendo bien nuestra misión como madres…
me acojo a tu termino de madre plasta que me ha encantado!
un besote
Q bonito q sigas buscando ese momento hasta lo máximo q te dejen 😉
justo pensaba eso el otro día, cuando canto, bailo o hago el chorras, antes se reían y ahora piensan que ya soy mayor para esas cosas.
Me alegro de que todavía piedas disfrutar esos momentos. A mí sólo me queda Violeta. von Claudia ando a caballo entre «todavía quiero jugar contigo a la wii» y «jo mamá deja de bailar por favorrrr». Sin embargo sé que cada etapa tiene su encanto, y tengo que encontrárselo como sea xD
Calla pordios, que estoy de un sensible hoy…
Que bonito
Precioso… y más real imposible!!
Precioso… Y mas REAL imposible!
Cuándo nos convertimos en madres plastas? Cuándo empezamos a hacer el ridículo?… 🙂 Yo creo que en el fondo les gusta y nos lo perdonan todo, especialmente cuando crecen y entienden que todo era, en definitiva, una muestra màs de amor. Cómo se les puede querer tantisisisisimo!!!!
No quisiera que esto pasase sin dar un salto más, sin cantar desafinando con cuchara en mano, de poner caras feas, desafiar a la gravedad con el zumo de naranja, de empapar el baño buceando o sin recrear footloose en el salón … lo mejor de tener niños es poder volver a serlo, ese es el milagro, ellos nos dan la oportunidad de regresar en el tiempo ¡quien puede negarse a una oferta tan tentadora!
Asi que, sí, totalmente de acuerdo APROVECHEMOS CADA MINUTO… y sigue siendo así , en el fondo no piensan que eres plasta sino una toliña encantadora…
Me ha encantado tu entrada, gracias